El secretario de Defensa, Pete Hegseth, recibió el 21 de mayo un avión Boeing 747-8 Intercontinental, con un lujoso acabado, de la familia real del Emirato de Qatar, para ser utilizado por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos como Air Force One. Sin embargo, este generoso obsequio infringe la Constitución estadounidense y una ley Federal que establece que la aceptación de un «regalo» por parte de la Casa Blanca o cualquier agencia Federal requiere la aprobación previa del Congreso.