A un año del mediático conflicto que la expuso en redes sociales, Consuelo Ulloa, más conocida como Miau Astral, regresa para contar su versión y cerrar un capítulo. En una entrevista exclusiva con Lima Limón, la influencer compartió su testimonio más sincero, reconociendo sus errores, narrando el daño sufrido y anunciando acciones legales contra quienes vulneraron su privacidad.
“Este video lo creé para expresar mi proceso personal y dar inicio a una nueva etapa en mi vida”, explicó, refiriéndose al video que publicó recientemente en sus plataformas, donde se presenta desde una nueva perspectiva, dejando atrás su alter ego.
El impacto de la exposición mediática: «Fue un proceso muy traumático»
Durante la entrevista, Ulloa habló sobre el fuerte impacto que tuvo la exposición pública tras ser acusada de acoso: “Fue un proceso muy traumático que me llevó a analizarme. Experimenté acoso por parte de periodistas; el juicio público al que fui sometida fue brutal”.
Además, reveló que está trabajando con la Defensoría de Audiencias para iniciar una acción legal: “Estamos interponiendo acciones legales contra quienes difundieron mi información sin consentimiento”, afirmó. “Durante la funa, se compartieron datos personales y médicos, lo cual es completamente ilegal. También hubo calumnias y daños”.
«Me destruyeron la autoestima»: la dura secuela emocional
“Estuve meses sin salir de casa. Tenía miedo de que me agredieran en la calle. Me gritaban cosas y no sentía que merecía ese odio”, confesó emocionada. “No cometí ningún crimen. Simplemente envié muchos correos. Reconozco que fue una actitud compulsiva, pero trabajé en ello y comprendí la raíz de lo que me estaba ocurriendo”.
La comunicadora reflexionó sobre el tratamiento recibido tras este episodio: “Me castigaron como si hubiese cometido un delito. Fui lapidada públicamente. Fue muy violento”.
El renacer de Consuelo: «Ya no soy Miau Astral»
Uno de los cambios más significativos fue dejar atrás su personaje público: “Este proceso simboliza un aprendizaje, una sanación, un cierre. Por eso decidí dejar el nombre de Miau Astral. Ya no me siento identificada con ese personaje. Soy alguien completamente diferente”, aseguró.
Y añadió: “Incluso siento que mi energía ha cambiado. He pasado página. Comencé otra relación amorosa y me reconecté con mi familia. Este renacer también significó reencontrarme con mis padres. Estoy en el mejor momento de mi vida”.
«Soy la bebé reno chilena»: resignificando el apodo
“Decidí adoptar el nombre de la bebé reno chilena y transformarlo, porque siento que me expusieron tanto que ya no tengo nada que ocultar. Mostraron mi oscuridad al mundo y hoy puedo afirmar que estoy de pie”, comentó.
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Para superar este proceso, contó que asistió a terapia dos veces por semana y encontró en la danza árabe una forma de reconexión: “Me hicieron pedazos la autoestima. Me trataron de loca frente a todo Chile. Tuve que reconstruirme desde cero”.
«Me equivoqué, pero no fui la única responsable»
Finalmente, Consuelo Ulloa hizo un llamado a comprender que las relaciones tienen múltiples perspectivas: “Sí, me obsesioné. Lo reconozco. Pero creo que se me cargó toda la culpa, y eso no es justo. Las relaciones no dependen de una sola persona”, reflexionó.
“No quiero culpar a nadie, pero siento que todo el peso recayó sobre mí. No fui la única responsable y no merecía tanto odio”.
Con esta nueva etapa, Ulloa espera que su historia no solo sirva como un medio de redención personal, sino también como un mensaje de autocuidado, reflexión y resiliencia para aquellos que han sido víctimas del escrutinio público.
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Con Información de www.limalimon.cl