La aplicación emplea aprendizaje automático y análisis en tiempo real para identificar riesgos potenciales y activar medidas de seguridad automatizadas.
En un entorno donde la tecnología se convierte en un aliado esencial para la seguridad, Uber se apoya firmemente en la inteligencia artificial (IA) para enriquecer la experiencia de sus usuarios. El objetivo es anticiparse a posibles riesgos antes de que el viaje comience.
¿De qué manera lo logra? Mediante modelos de aprendizaje automático, capacitados con millones de datos históricos de viajes a nivel mundial. Este sistema, actualmente operativo en países como Chile, examina diversas variables al solicitar un viaje y puede detectar patrones inusuales o potencialmente peligrosos. En tales situaciones, la aplicación solicita verificaciones adicionales, como el escaneo de un documento de identidad o una selfie del usuario.
Además, se añade una capa de seguridad para aquellos que realizan pagos en efectivo y son nuevos en la plataforma. Si el modelo identifica algo fuera de lo normal, solicita la verificación de la credencial de identidad o pasaporte directamente desde la aplicación. Lo mejor de todo es que esta tecnología tiene la capacidad de identificar documentos falsos o inválidos, lo que permite detectar intentos de fraude.
Durante el trayecto, herramientas como RideCheck supervisan en tiempo real la ruta utilizando los sensores del smartphone del conductor (GPS, acelerómetro y giroscopio). Si se detectan paradas inesperadas o cambios bruscos en el recorrido, la aplicación emite un aviso automático tanto al conductor como al usuario, preguntando si todo está en orden y ofreciendo asistencia inmediata.
“En Uber, la adopción de modelos de inteligencia artificial es fundamental en nuestra estrategia de seguridad. Hemos desarrollado herramientas automatizadas que actúan antes, durante y después de cada viaje, ajustándose constantemente para identificar y prevenir posibles riesgos”, comentan desde la empresa.
En un entorno donde viajar con confianza es esencial, Uber demuestra que la IA es más que una simple tendencia: es una herramienta concreta para garantizar la seguridad de las personas.
Con Información de hoysantiago.cl