Sure, aquí tienes el contenido reescrito:
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“El infierno y el fuego fueron creados para ser liberados.
Poseeré tu cuerpo y te haré arder.
Tengo el fuego, tengo la fuerza.
Tengo el poder de hacer que mi maldad tome su curso.”
Canción: 666 El Número de La Bestia de Iron Maiden.
El tema “El Número de la Bestia” de Iron Maiden fue lanzado el 26 de abril de 1982. El nombre de la banda proviene de una aterradora máquina medieval creada por la Inquisición para castigar a mujeres acusadas de ser poseídas por el Demonio. Esta máquina consistía en un sarcófago interno cubierto de afiladas púas metálicas, que infligía un tormento lento y doloroso. Este castigo era por su «errónea» forma de amar.
La controversial portada del álbum “Sanctuary”, lanzado en 1980, mostraba a la mascota de la banda, Eddie, con un cuchillo al lado del cadáver de la entonces primera ministra británica, Margaret Thatcher. Dada su postura dura contra la URSS, la prensa la apodó “La Doncella de Hierro”, lo que llevó a que Eddie, ofendido, decidiera vengarse. Esto provocó que la Iglesia Católica censurara la imagen, obligando a la banda a poner un parche negro sobre los ojos de Thatcher.
En Chile, el Cardenal Medina decía que Iron Maiden era un grupo satánico y una mala influencia para los jóvenes. Cuando anunciaron un concierto en 1992, Medina lanzó una cruzada en su contra, viéndolos como una amenaza. Su famosa canción “El Número de la Bestia” se refería al 666, un número mencionado en el libro del Apocalipsis. Este término fue utilizado por los cristianos durante el imperio de Nerón para referirse secretamente a Roma, un lugar lleno de persecuciones.
Desde joven, Medina luchó contra lo que consideraba demonios, mostrando una aversión por el sexo y cualquier cuestionamiento a la Doctrina Católica. Después de estudiar en el Seminario Pontificio Menor y la Universidad Católica, se dedicó a perfeccionar los rituales de exorcismo de la Iglesia. Con el tiempo, se convirtió en Decano de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Chile, un bastión del conservadurismo religioso.
Tras el golpe militar de 1973, Medina fue nombrado Pro Gran Canciller de la Universidad Católica por las autoridades militares. En 1998, cuando Pinochet fue arrestado en Londres, se opuso a su detención y pidió su liberación. En 2006, fundó la Academia de Líderes Católicos para promover la moral conservadora. Afirmó en 1990 que “la democracia no significa que Dios desee que se implemente”.
Despertar la lujuria
En 2011, tras el escándalo del sacerdote Fernando Karadima, Medina argumentó que no debía ir a prisión, porque había una «diferencia» entre abusar de un menor de 8 años y uno de 17, considerando a este último capaz de consentir. Este doble estándar también se aplicó a la cantante Madonna, a quien calificó de “despertar la lujuria”, aunque ella pudo presentarse en Chile en 2008.
Su aversión hacia la sexualidad lo llevó a oponerse a iniciativas educativas sobre afectividad durante el gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle y a criticar a los católicos que votaban por candidatos no alineados con sus creencias. Medina nunca reconoció las violaciones de derechos humanos durante el régimen de Pinochet, manteniéndose en una postura ultra ortodoxa que rechazaba cualquier reinterpretación de la fe. Se le critica por su influencia negativa en la Iglesia y la sociedad chilena, destacando su persecución al movimiento de la Teología de la Liberación. En 1985, fue anfitrión de oponentes a esta corriente, terminando con la “Declaración de Los Andes”, que condenaba su práctica.
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Con Información de pagina19.cl