El reggaetón se ha convertido en un verdadero fenómeno musical en las últimas dos décadas, a pesar de que sus raíces se remontan aún más atrás. Sin embargo, a diferencia de países como República Dominicana, Puerto Rico o Colombia, Chile no ha tenido históricamente el mismo impacto en esta escena. Los primeros éxitos del género urbano han llegado más recientemente al país.
No obstante, era de esperar que Chile, como un fuerte consumidor de este estilo musical, aportara grandes contribuciones al reggaetón. Artistas como Tomasa del Real han abierto una puerta que ya no se puede cerrar; hoy en día, la participación de Chile en el reggaetón es una realidad.
En contraste con épocas pasadas, como los años 90 o principios de 2000, los recursos online modernos ahora facilitan la difusión del trabajo de los creadores musicales contemporáneos. Esto permite que sus temas, producidos desde Chile, lleguen y se hagan populares entre los aficionados al reggaetón en todo el mundo, democratizando el acceso a este estilo de música.
El entorno digital se está utilizando para generar una oferta robusta de casino en línea para jugadores chilenos, videojuegos innovadores, así como series y películas de streaming. ¿Por qué no debería ser útil también para que las nuevas promesas del reggaetón compartan su música y lleguen directamente a los oyentes, sin las limitaciones de los modelos tradicionales en un mercado global?
Esto es justo lo que está sucediendo; los fanáticos de esta escena encuentran a sus artistas y temas favoritos en redes sociales y otras plataformas contemporáneas. Paralelamente a lo que ocurre en las calles y en espacios dedicados a la creación de este estilo melódico, Internet permite que las obras se propaguen, logrando incluso en algunos casos llegar a ser líderes en las listas Billboard.
Un gran ejemplo es «Gata Only», que fue elegida como la mejor canción hispana de 2024 según la prestigiosa revista Rolling Stone. Sus creadores, los chilenos FloyyMenor y Cris Mj, lograron gran repercusión en TikTok, lo que les permitió alcanzar un amplio público (en pocos meses, superaron los 135 millones de visitas).

Sin embargo, la tecnología es solo una herramienta; no puede reemplazar la creatividad ni la evolución en las tendencias. Precisamente, un cambio de ciclo parece ser uno de los factores clave en el auge de los artistas chilenos. Según algunos expertos, este momento llegó en 2019, con la transformación del reggaetón chileno de un movimiento alternativo a un fenómeno de masas en las discotecas.
Los artistas locales comenzaron a competir con las estrellas internacionales del género. Entre los que han destacado se encuentran Marcianeke, Pablo Chill-E y Paloma Mami, quienes incluso han colaborado con nombres consagrados de la música latina, consolidando su popularidad.
Desde las discotecas, la música se ha abierto paso hacia las radios y redes más masivas, alcanzando a un público amplio que ha presenciado la evolución del estilo musical predominante: del pop indie hacia un nuevo sonido más potente con un folclore propio: el reggaetón. Esto ha permitido a artistas como FloyyMenor y Cris Mj, así como a Jere Klein, disfrutar del éxito en esta industria más allá de las fronteras chilenas.
¿Cuál será el futuro? Algunos medios osan mencionar nombres concretos, como los de Kuina, Akatumamy o Fufibunni, quienes están fusionando estilos y creando un nuevo escenario en este mercado. Un mercado en el que Chile hoy tiene mucho que ofrecer y donde sus artistas ya son parte de la élite mundial.
Con Información de www.lanacion.cl