Ante las denuncias sobre carreras ilegales y peligrosas en el norte de Los Ángeles, las autoridades de seguridad han sido instadas a intensificar la fiscalización, debido a los riesgos que representan para otros conductores.
Esta situación genera preocupación entre los vecinos y automovilistas que circulan por la avenida Las Industrias, especialmente en su cruce con la avenida Sor Vicenta. Las carreras clandestinas atraen a grandes multitudes y convierten las calles en pistas de carreras, poniendo en peligro la vida de los participantes y de los transeúntes.
El control deficiente y la falta de acción por parte de las autoridades son aspectos criticados, a pesar de las múltiples denuncias recibidas. La diputada Karen Medina ha solicitado al Ministerio de Seguridad y a la Subsecretaría de Prevención del Delito que implementen soluciones rápidas y efectivas, sobre todo desde jueves hasta domingos.
“No podemos esperar a que ocurra una tragedia para actuar. En esta zona hay mujeres embarazadas que no pueden descansar por los ruidos ensordecedores, así como niños con autismo que deben refugiarse para escapar del estruendo”, afirmó Medina.
Además, subrayó que “los automovilistas y peatones que transitan por estas calles no tienen culpa de verse envueltos en estas situaciones tan peligrosas. Todos ellos están expuestos a grandes riesgos mientras el Estado permanece ausente”.
Zonas afectadas por carreras clandestinas
En la carta enviada, se mencionó que las competiciones ilegales se concentran en el cruce de Las Industrias con Sor Vicenta, así como en Tres Vientos, Guillermo Marconi y Avenida Oriente, donde ya han sucedido múltiples accidentes de tráfico, con implicados que huyen del lugar.
A pesar de la colocación de barreras en estas áreas, los participantes en las carreras clandestinas logran evadir los controles, utilizando parques y calles internas como rutas de escape ante la presencia de fiscalizadores o carabineros.
“Este no solo es un problema de tráfico, sino que también un foco de incivilidad que perjudica gravemente a la comunidad”, añadió la diputada. Los vecinos han comentado que viven con miedo y sufren de insomnio a causa del ruido constante de los motores, además del consumo de drogas y alcohol que suele asociarse a estas actividades.
Se solicitó al Ministerio de Seguridad que informe sobre las medidas adoptadas para afrontar este problema, así como si existen planes para la instalación de cámaras de vigilancia o para mejorar la iluminación. También se sugirió convertir la actual Tenencia de Carabineros Centenario en una Subcomisaría o Comisaría para incrementar la presencia policial.
“No permitiremos que esta situación se convierta en algo habitual. Las familias de Los Ángeles merecen vivir en paz y sin temor”, concluyó Medina. Se espera que la autoridad elabore un mapa específico para el sector nororiente que permita enfocar operativos y recursos necesarios para reducir este problema.
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Con Información de chilelindo.org