
Este martes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comunicó que elevará los aranceles sobre el acero y el aluminio importados de Canadá al 50%. Esta medida, que comenzará a implementarse el miércoles, es una respuesta al reciente aumento del 25% en el precio de la electricidad que Ontario envía a Estados Unidos.
Trump también ha solicitado la eliminación de los altos aranceles canadienses que gravan productos lácteos estadounidenses, los cuales varían entre el 250% y el 390%. El mandatario advirtió que, si esta demanda no se cumple, a partir del 2 de abril incrementará significativamente los aranceles sobre los automóviles importados de Canadá, lo que podría tener un impacto serio en la industria automotriz canadiense.
En una declaración que ha suscitado controversia, Trump sugirió que “la única opción sensata sería que Canadá se convierta en nuestro quincuagésimo primer estado”, lo que ha generado reacciones negativas en varios sectores.
Esta decisión forma parte de un aumento en las tensiones comerciales entre ambos países, agudizadas en los últimos meses por la imposición de aranceles adicionales a productos canadienses y mexicanos. Los expertos advierten que estas acciones podrían alterar las cadenas de suministro en América del Norte y provocar un aumento en los precios para los consumidores.
Con Información de hoysantiago.cl