En los últimos días, se ha observado que varias playas de Chile han perdido terreno y, en algunos casos, prácticamente han desaparecido. Este fenómeno puede ser causado por diversos factores.
El profesor Juan Díaz, de la Escuela de Ciencias del Mar de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, explica que esto se debe a múltiples factores climáticos que afectan las costas. “Una de las principales causas de la erosión de las playas en Chile son los cambios climáticos, especialmente en el oleaje. El anticiclón del Pacífico Sur, que provoca los vientos que generan el oleaje, ha experimentado una intensificación, expansión y desplazamiento hacia el sur”, señala.
En esta línea, el académico añadió que “esto ha resultado en cambios en los vientos, lo que ha provocado un aumento en la altura del oleaje entre 0,1 y 0,2 metros, una prolongación de su período medio de 0,2 a 0,4 segundos, y un giro en su dirección de 1,8 a 3,2 grados.”
Una segunda causa que puede explicar la erosión de las playas es el cambio en el nivel del mar. En general, cualquier incremento en el nivel medio del mar es claramente un factor que contribuye a la erosión de las playas.
Díaz mencionó que no se tiene claridad acerca de cómo el aumento del nivel del mar afecta específicamente a Chile en términos de erosión, pero una tercera causa que podría influir son los alzamientos y hundimientos que ocurren tras los grandes terremotos en la región.
“Un alzamiento o hundimiento costero como resultado de un terremoto puede modificar significativamente la configuración de una playa, especialmente si se produce un hundimiento. Sin embargo, con el tiempo (en un lapso de 50 años o más), es posible que la corteza terrestre vuelva a su forma original. Con los tsunamis, también puede ocurrir erosión costera, aunque esta podría recuperarse en un período de 5 a 10 años,” afirmó el profesor Díaz.
Otra causa relacionada es el aumento del caudal de los ríos en invierno y el deshielo en primavera, momentos en que estos ríos transportan más sedimentos hacia el mar. “Antes de las lluvias de 2022, experimentamos una sequía de aproximadamente diez años, durante la cual los ríos apenas transportaban sedimentos hacia la costa. Esto resultó en una falta de material para reabastecer las playas. Las playas pierden arena constantemente, y al no recibir sedimentos de los ríos, no pudieron regenerarse,” explicó el académico de PUCV.
Para Juan Díaz, tanto los cambios climáticos como la sequía prolongada de la última década son factores determinantes en el estado actual de las playas chilenas.
Con Información de www.elperiodista.cl