En la noche del miércoles, un oficial de Carabineros fue expulsado de la institución tras haber tomado fotografías de dos estudiantes detenidos por su supuesta participación en el robo de un vehículo en Ñuñoa, un incidente que dejó a un sargento gravemente herido.
El suceso tuvo lugar en la 18° Comisaría de Ñuñoa, donde dos jóvenes de 21 y 23 años fueron llevados para un control de identidad. Esto sucedió después de que intentaron escapar cerca del lugar donde el sargento José Miguel Villegas fue baleado, específicamente en la intersección de Ramón Cruz y Eduardo Castillo Velasco.
Una vez realizada la investigación interna, se determinó que ambos jóvenes no estaban involucrados en la «encerrona», ya que fueron detenidos por Carabineros mientras huían por los disparos y carecían de responsabilidad en el incidente.
A pesar de ser liberados posteriormente, durante la investigación un funcionario policial tomó fotografías de ellos que empezaron a circular en redes sociales.
Al día siguiente, los familiares de los jóvenes se expresaron en el programa matutino «Contigo en la Mañana» de Chilevisión. El padre de uno de los estudiantes afirmó que sus hijos fueron detenidos arbitrariamente y golpeados por Carabineros de Chile, sin que se les brindara información adecuada al respecto.
Además, la familia criticó a la institución, alegando que se ha dañado la integridad de los estudiantes al ser arrestados y expuestos públicamente: “Esto nos ha ocasionado una situación muy grave, tanto para ellos como para nosotros como familia, ya que fueron etiquetados como delincuentes en la comisaría”, comentó un familiar.
Con Información de www.elciudadano.com