
Ayer, cientos de residentes del macrocampamento de Cerro Centinela se congregaron en el gimnasio de la Escuela Padre André Coindre de San Antonio para formalizar la creación de las primeras cooperativas de vivienda. Este proceso seguirá durante esta semana y la próxima, con la constitución de más de 30 asociaciones, que reunirán alrededor de 3.200 familias ya inscritas.
La creación de estas cooperativas está respaldada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, que busca facilitar la adquisición del terreno a través de acuerdos con los propietarios.
La delegada del Minvu para el macrocampamento de San Antonio, Gloria Maira, compartió que “hoy es un día muy significativo. Hemos trabajado arduamente con los pobladores del cerro para constituir las cooperativas que les permitirán comprar el terreno. Iniciamos hoy este proceso y formaremos más de 30 cooperativas en total. Esta semana se establecerán 16 y la próxima semana se formarán 16 más. Actualmente, hay 3.200 familias inscritas en las cooperativas, lo que significa que la gran mayoría del cerro se ha sumado a esta iniciativa para acceder a crédito y adquirir el terreno”.
“El próximo lunes se llevará a cabo una nueva reunión con los propietarios, no es la primera vez que nos reunimos, hemos tenido varias conversaciones con ellos y sus abogados, y esperamos poder acercar posiciones para alcanzar un acuerdo que beneficie a todos. Ese acuerdo permitirá a los pobladores comprar el terreno y a los dueños ejercer su derecho a la venta. El ministerio ha tomado las medidas necesarias para llegar a este acuerdo, incluyendo la constitución de las cooperativas como un mecanismo de compra. Además, se han elaborado varios documentos, como el análisis normativo del terreno y su tasación. En total, se han preparado cinco documentos que el ministerio entregará a ambas partes para facilitar este entendimiento”, añadió.
Por su parte, Elizabeth Rivera, quien presidirá una de las nuevas cooperativas, expresó que “me llena de alegría poder ayudar a mis vecinos. He estado luchando durante 5 años, tocando puertas que, en ocasiones, se cierran en nuestras caras y hemos enfrentado momentos difíciles. La gente critica sin tener idea de lo que es vivir en un campamento. Afortunadamente, se han abierto puertas y el Estado ha reconocido la necesidad de apoyar a estas personas, lo que apreciamos mucho”.
Con Información de desenfoque.cl