Rodrigo Mundaca, el gobernador de Valparaíso, enfatizó que el Estado debe actuar como garante y «explotar todas las alternativas de diálogo antes de llevar a cabo el megadesalojo de la toma del cerro Centinela en San Antonio, programado para el 27 de febrero.
En una entrevista con Cooperativa, mencionó que esta decisión, respaldada por un fallo de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, afectará a más de 10.000 personas que residen en 4.136 viviendas.
«Más de 10 mil personas viven en el Cerro Centinela, de las cuales el 33 por ciento son niños, niñas y adolescentes, y solo un 13 por ciento son extranjeros», comentó.
El gobernador destacó que «según el último censo, la Región de Valparaíso tiene 374 campamentos», lo que la convierte en la región con mayor concentración de campamentos en el país. Ante esta situación, que calificó como «la más grave que enfrentamos desde el punto de vista social y regional», Mundaca subrayó la necesidad de que «el Estado explore todas las instancias de diálogo y conversación».
Mundaca: «El rol del Estado en esta situación debe ser de garante»
Respecto a la toma del Cerro Centinela, mencionó que hay una reunión programada para el lunes 24 de febrero con los propietarios y el Ayuntamiento de San Antonio, con el objetivo de alcanzar un acuerdo que favorezca un desarrollo ordenado del proceso. «Entiendo que también estará presente el subsecretario del Interior, y debemos agotar todas las opciones disponibles y buscar los mecanismos adecuados», enfatizó el gobernador.
«Si el propietario de la tierra está dispuesto a vender, ya es un buen indicio […] La pregunta que debemos plantearnos es de dónde obtendremos los 45 mil millones, quién pagará. Por lo tanto, creo que la función del Estado en esta cuestión debe ser la de garante», explicó en la entrevista mencionada.
En declaraciones a Radio Biobío, el gobernador Mundaca destacó que, según conversaciones con autoridades policiales, se requerirían al menos 1.200 policías para llevar a cabo la orden de desalojo en el Cerro Centinela, además de la necesidad de vehículos pesados y otras maquinarias para realizar esta operación.
“Esto implicaría desalojar la toma por sectores, lo cual no se podría completar en un solo día, en dos días, en una semana o en un mes, sino que demandaría un lapso de tiempo considerablemente mayor”, aseguró.
Con Información de www.elciudadano.com