Con el comienzo del año escolar a la vista, seleccionar la mochila y el calzado adecuados para los niños es una tarea esencial que merece atención.
El doctor Juan Fuenzalida, traumatólogo infantil de la Clínica Universidad de los Andes, detalla los aspectos a considerar al adquirir estos elementos y los riesgos asociados a decisiones inadecuadas.
Calzado: comodidad y seguridad
El calzado no solo protege contra el frío, la humedad y superficies irregulares, sino que también es crucial para mantener el equilibrio del cuerpo.
«El pie juega un papel fundamental en el sistema de equilibrio, por lo que el calzado debe permitir una adecuada movilidad y adaptación. La opción ideal es aquella que no limita el movimiento natural», indica el especialista.
Para un óptimo ajuste, los zapatos deben ser:
Suaves y flexibles
Amplios y confortables
Con buena ventilación y el soporte necesario
Generalmente, las zapatillas deportivas son una excelente elección, pues ofrecen movilidad, confort y se adaptan a distintas condiciones climáticas y actividades escolares.
Mochila: prevenir sobrecargas y cuidar la postura
La mochila es fundamental para el transporte diario de útiles escolares, por lo que debe cumplir ciertas características que eviten sobrecargas en la columna y los hombros:
Tamaño proporcional al niño.
Respaldo acolchado y ventilado.
Correas acolchadas y ajustables, además de una correa adicional a nivel torácico.
No debe exceder la zona lumbar (cintura) e idealmente tener soporte en esa área.
El peso de la mochila no debe superar el 15% del peso corporal del niño. Si es necesario transportar más peso, es aconsejable optar por mochilas con ruedas.
¿Qué riesgos conlleva una elección inadecuada?
Aunque no suele causar problemas graves, un calzado o mochila inapropiados pueden tener un impacto negativo en el bienestar a largo plazo. Entre las principales consecuencias destacan:
Incomodidad y fatiga
Sobrecarga en hombros y columna
Mayor riesgo de lesiones por exceso de peso
«La elección del calzado escolar y la mochila debe hacerse con responsabilidad. Un calzado adecuado y una mochila bien elegida pueden influir significativamente en la salud y bienestar de los niños, facilitando su movilidad y evitando molestias innecesarias», concluye el doctor Fuenzalida.
Con Información de www.elperiodista.cl