La accesibilidad para personas con discapacidad visual es uno de los principales retos para lograr una inclusión efectiva en las experiencias de lectura. A diario se observan pocos ejemplos de inclusión en la vida cotidiana, como el uso de lenguaje de señas en televisión, la instalación de semáforos con señales audibles y la adaptación de materiales visuales a formatos táctiles. Estas iniciativas no solo facilitan el acceso a la información, sino que también fomentan una sociedad más equitativa, consciente de las necesidades de todas las personas.
Con este fin, se ha creado el proyecto «Condorito Inclusivo», impulsado por el Centro de Cartografía Táctil (CECAT) de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM) en conjunto con el Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS).
Esta colección es destacada como el primer cómic accesible elaborado en Chile. La primera fase se entregó en septiembre de 2019 e incluyó seis revistas, cada una centrada en un personaje de la popular saga chilena. La segunda etapa se lanzó en septiembre de 2024.
La colección adapta la emblemática historieta del «plumífero de Pelotillehue», incorporando texto en braille y tipografía de gran tamaño, para facilitar su lectura y hacerla accesible a personas con discapacidad visual.
Además, se han creado ilustraciones táctiles que permiten a los lectores «ver» a los personajes a través del tacto. Cada ejemplar cuenta con láminas en relieve que representan las figuras y escenas de la historieta. Por ejemplo, en la primera edición, los lectores pueden explorar la forma de un cóndor, comprendiendo así la estética de Condorito y sus características físicas de forma tangible. Asimismo, las ediciones están elaboradas con materiales específicos que garantizan la durabilidad y legibilidad del braille, ofreciendo una experiencia de lectura de alta calidad.
Así, se ofrece una experiencia accesible que puede ser disfrutada por toda la población, tanto personas con discapacidad visual como neurodivergentes. Esta publicación ha tenido un impacto significativo en estas comunidades, permitiéndoles conocer a los personajes y sus aventuras de una manera innovadora y accesible, disfrutándolo como si fuera la primera vez.
Un caso destacado es el de Patricio, un hombre ciego que pudo acceder al cómic adaptado y «conoció» a Condorito de una forma singular. «Lo que más me impresionó fue cómo se representaron los personajes y las escenas a través de las láminas táctiles. Es asombroso poder distinguir la figura de un personaje como Condorito con el tacto, algo que no creía posible antes de tener esta edición en braille», comenta.
Patricio también enfatiza la importancia de permitir que las personas accedan a contenidos culturales que antes solo podían experimentar de forma indirecta o con ayuda. «Esto ha sido un gran avance para nosotros como personas ciegas, porque se traduce en una mayor independencia en el conocimiento». Además, señala que sería beneficioso aplicarlo a otros ámbitos, como «el acceso a la información en las votaciones, un área en la que deberíamos seguir progresando».
Edición 2024-2025
En las primeras seis revistas de la colección, los lectores pudieron disfrutar de personajes como Condorito, Washington, Yayita, Pepe Cortisona y Doña Tremebunda. En la segunda parte, se añadieron personajes como Yuyito, Genito, Cabellos de Ángel y Tomate, entre otros.
En septiembre de 2024 se completó el conjunto de doce revistas de «Condorito Inclusivo», que se entregaron de forma gratuita a bibliotecas e instituciones para personas ciegas y con neurodivergencias en todo Chile. «El objetivo es que estos ejemplares no solo sean piezas de colección, sino que se utilicen activamente, asegurando un acceso real a ellos», explica Enrique Pérez de Prada, director del CECAT.
«Este proyecto demuestra el potencial de la cultura como herramienta inclusiva, superando el simple acceso a la información y brindando entretenimiento y educación a aquellos que tradicionalmente han tenido menos oportunidades de acceder a expresiones culturales», enfatiza el director del CECAT.
Con «Condorito Inclusivo», la UTEM y el CECAT están dando un paso más hacia la inclusión cultural, asegurando que todos, sin importar sus discapacidades, puedan disfrutar de un pedazo de la historia y cultura chilena.
Con Información de desenfoque.cl