«La esperanza de encontrarla con vida»: La familia de Julia Chuñil clama justicia tras 100 días de su desaparición
La ambientalista mapuche Julia Chuñil está desaparecida desde hace 100 días en la Región de Los Ríos, Chile, en circunstancias que han despertado sospechas, especialmente tras recibir numerosas amenazas. Como reporta EFE, su familia sigue aferrándose a la esperanza de encontrarla con vida y reclama más diligencia en la investigación, así como la denuncia de la desprotección que enfrentan los defensores ambientales en el país.
Julia Chuñil, de 72 años, desapareció el 8 de noviembre de 2024 mientras se encontraba en los cerros de Máfil, en un terreno de 900 hectáreas de bosque nativo, buscando animales perdidos. Su nieta, Lyssette Sánchez, comenta a EFE que Chuñil «cada día recorría los cerros» y conocía el lugar mejor que nadie. Sin embargo, ese día no regresó, sumiendo a su familia en una angustiosa incertidumbre.
«No hemos recibido noticias sobre mi madre; todos los días nos cuestionamos dónde está y qué le pudo haber pasado, pero mantenemos la esperanza», manifestó a EFE Pablo San Martín Chuñil, su hijo mayor. La familia asegura que Julia fue sacada del campo sin dejar rastro, y argumentan que su desaparición está relacionada con «intereses económicos y políticos que están intrínsecamente ligados».
La búsqueda de Chuñil ha sido ferviente, reporta su nieta. La zona, carente de electricidad y comunicación, presenta un terreno empinado y cubierto de vegetación, lo que ha complicado las labores de búsqueda. «Se escuchaban gritos en la noche de los vecinos que la buscaban en los cerros hasta tarde», recuerda Sánchez. Aunque se sumaron bomberos y policías, la familia critica que la investigación no tomó impulso real hasta que el caso llegó al Parlamento.
Julia Chuñil, quien lideró la Comunidad Indígena de Putreguel desde 2014, se oponía a la deforestación y a las amenazas de empresas forestales por la defensa de tierras ancestrales. «Ella conocía este lugar como nadie y jamás pensó en explotar la madera; en cambio, su intención era cuidar de sus animales y conservar estas tierras», aseguró su hijo a EFE.
El caso de Chuñil ha generado preocupación a nivel internacional, especialmente en el marco del Acuerdo de Escazú, que Chile ratificó en 2022 para proteger a los defensores ambientales. Sin embargo, Sebastián Benfeld, presidente de Escazú Ahora, lamentó a EFE que «no hay una implementación efectiva» del acuerdo. En 2023, se reportaron amenazas contra 20 defensores ambientales en Chile, siendo el 65% de ellos mujeres.
La desaparición de Chuñil evoca el recuerdo de Macarena Valdés, otra ambientalista mapuche que fue hallada muerta en 2016 en circunstancias misteriosas. Ambos casos subrayan los peligros que enfrentan los defensores ambientales en América Latina, considerada la región más arriesgada del mundo para esta labor. Según Escazú Ahora, más de 100 defensores ambientales son asesinados cada año en la región.
La familia de Chuñil ha presentado una querella contra quienes resulten responsables por secuestro, homicidio o femicidio, y continúa exigiendo justicia. «Aquí, en este lugar, ya no está», aseguró San Martín tras 100 días de búsqueda. No obstante, la esperanza persiste: «La seguiremos buscando», afirmó Lyssette Sánchez, quien mantiene la ilusión de encontrar a su abuela con vida.
El presidente Gabriel Boric expresó en diciembre su «preocupación» por el caso y ofreció recursos para la investigación, pero la familia demanda mayor atención y una reunión que aún no se ha concretado. Mientras tanto, organizaciones tanto nacionales como internacionales siguen reclamando justicia y protección para los defensores ambientales en Chile y en toda América Latina.
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La ambientalista Julia Chuñil lleva 100 días desaparecida en Chile
Con Información de www.elciudadano.com