Desde el 31 de enero, unidades del Ejército de Colombia y del Ejército de Venezuela, junto con fuerzas policiales de ambos países, han iniciado un extenso despliegue en la frontera compartida, en la región del Catatumbo. Esto se lleva a cabo tras el violento enfrentamiento que tuvieron durante las dos últimas semanas de enero los grupos subversivos colombianos Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia Ejército Popular (FARC-EP) por el control de las rutas de tráfico de narcóticos.