A pesar de que la economía chilena no está atravesando su mejor momento, el sector comercial ha experimentado un crecimiento interanual del 3,2% en septiembre, con casi todas las divisiones mostrando resultados positivos. Esto abarca las ventas en supermercados, el comercio minorista, mayorista y el comercio electrónico.
La digitalización de los procesos, desde la gestión de los comercios hasta el marketing, ha sido clave para el desarrollo de la base de clientes del retail chileno, permitiendo que cada vez más tiendas cuenten con herramientas para expandir su alcance a nivel nacional y regional.
Uno de los factores que está impulsando la digitalización del comercio en Chile es el Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés), que se refiere a la interconexión de dispositivos y procesos a través de Internet. Esta tendencia, que comenzó como una vía para modernizar los hogares, se ha convertido en un componente esencial para muchos negocios en el país.
IoT, retail y Chile
La relevancia del IoT radica en su capacidad para transferir todo tipo de información en tiempo real, recopilando datos y gestionando dispositivos de manera centralizada para ofrecer una experiencia segura, fluida y sin inconvenientes.
Para el comercio, el IoT no solo proporciona comodidad, sino que se ha transformado en una herramienta vital para optimizar procesos, mejorar la seguridad, simplificar las ventas y desarrollar estrategias con menor margen de error.
Chile no solo ha sido uno de los países que más ha invertido en telecomunicaciones, sino que también es uno de los que más registra inversiones en tecnologías de la información (IT) a nivel empresarial, con entre un 26% y un 35% de las pymes indicando que aumentaron su inversión en esta área durante 2023.
Se anticipa que el mercado del IoT crecerá más del 7% en los próximos cinco años, con las empresas desempeñando un papel crucial en el desarrollo de estas tecnologías para simplificar la gestión, mejorar la seguridad e incluso aumentar sus ventas.
Tecnología más utilizada
Según diversos expertos, el IoT ya se utiliza en Chile en sectores como la minería, la logística, la agricultura y la manufactura. Pero, ¿es viable adaptar esta tecnología al comercio minorista en nuestro país? Para averiguarlo, es fundamental comprender las tecnologías que se implementan y su posible impacto en el comercio nacional:
- Conectividad y software de gestión
Las tiendas que deseen incorporar el IoT en sus operaciones deben centrarse en mejorar la conectividad de su establecimiento y en implementar software de gestión. Dado que el IoT se basa en dispositivos interconectados, su efectividad depende de contar con una conexión estable y la capacidad de acceder a servicios en la nube.
Con herramientas de gestión, el comercio puede recopilar y aprovechar información en tiempo real. Por ejemplo, tener un inventario actualizado permite a los clientes conocer la disponibilidad y el precio de cada producto, una ventaja significativa en temporadas de alto consumo.
- Dispositivos inteligentes
Una tienda que quiera maximizar el potencial del IoT también necesita contar con dispositivos inteligentes que puedan recopilar y compartir información entre sí. Estos dispositivos requieren monitoreo constante, ya que un mal funcionamiento podría no solo limitar el suministro de datos, sino también generar información errónea.
Por ejemplo, una caja que actualiza el inventario automáticamente al registrar una venta, o una cámara domo con tecnología IP que puede ser supervisada desde computadoras y teléfonos inteligentes, son dispositivos que permiten a las tiendas beneficiarse del IoT.
Al igual que las cámaras de vigilancia, los sensores proporcionan una gran cantidad de datos tanto al personal de seguridad como a la gerencia de la tienda.
Gracias al IoT, los sensores informan en tiempo real sobre cualquier anomalía en el establecimiento, como cambios bruscos de temperatura, fallas en el suministro eléctrico, el nivel de ocupación, así como el estado de dispositivos y maquinaria, entre otros.
El IoT sigue siendo un concepto relativamente nuevo en Chile, utilizado principalmente por las empresas más grandes. Sin embargo, las expectativas para la segunda mitad de la década apuntan hacia una mayor adopción en diversos sectores, lo que sugiere que incluso los pequeños comerciantes podrán optimizar sus procesos con esta tecnología.
Con Información de www.lanacion.cl