Una vez más, es importante destacar que estos delitos importados son una preocupación con la migración ilegal caribeña y no deben ser tolerados. Las extorsiones son especialmente graves, ya que pueden obstaculizar cualquier esfuerzo de emprendimiento y contribución al país.

Debemos tomar decisiones sobre qué tipo de migración deseamos para nuestro país. Por un lado, tenemos a aquellos que trabajan arduamente, cumplen con sus obligaciones fiscales y contribuyen creando empleos. Por otro lado, existen personas que llegan solo para cometer actos delictivos. Si no se inician deportaciones masivas de migrantes ilegales pronto, esto podría interpretarse como un privilegio otorgado al segundo grupo.

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