Las fuerzas rebeldes de Siria, lideradas por el grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS) y sus aliados, han anunciado la caída de Damasco, la capital del país, después de una ofensiva rápida que duró casi una semana y llevó al colapso del régimen de 24 años del presidente Bashar al Assad. Según un comunicado transmitido por la televisión pública, «El tirano Bashar al Assad ha sido destituido, todos los prisioneros de la prisión de Damasco han sido liberados. Esperamos que los combatientes y ciudadanos preserven la soberanía del Estado de Siria.»
El primer ministro sirio, Mohamed Ghazu al Jalali, dijo en una entrevista que el Gobierno está dispuesto a colaborar con cualquier fuerza «elegida por el pueblo» y que su último contacto con el presidente Bashar al Assad fue el sábado por la tarde. El Mando Militar de Operaciones de la coalición rebelde, compuesta por HTS y sus aliados, hizo hincapié en la protección de las instituciones y bienes públicos, así como de las propiedades privadas.
Se menciona la posibilidad de transferir el poder a un órgano de transición en el país, y se comparten videos no verificados de insurgentes asaltando el palacio presidencial y destruyendo estatuas importantes del expresidente Hafez al Assad. El comandante en jefe de las milicias de las Fuerzas Democráticas Sirias celebró la caída del régimen de Damasco como un «momento histórico» y expresó su esperanza de una nueva Siria basada en la democracia y la justicia.
Bashar al Assad, cuyo paradero se desconoce, se rumorea que ha huido de Damasco. Esta ofensiva de rebeldes y yihadistas es la primera a gran escala desde el alto al fuego de 2020 entre Turquía y Rusia. El Kremlin, uno de los principales apoyos internacionales de Assad, no se ha pronunciado todavía.
Con Información de chilelindo.org