En la actualidad, se estima que alrededor de 420 millones de personas en el mundo sufren de diabetes, según la Organización Mundial de la Salud. De estas, cerca de 9 millones tienen diabetes tipo 1, una forma de la enfermedad que se produce por la destrucción de las células beta que producen insulina. En Chile, aproximadamente el 14% de la población vive con diabetes, y hay 23,716 personas diagnosticadas con diabetes tipo 1. El Dr. Bruno Grassi, especialista en diabetología, destaca la necesidad de desmitificar creencias sobre esta enfermedad, ya que no es necesariamente hereditaria y puede desarrollarse a cualquier edad.
La diabetes tipo 1 no puede prevenirse con cambios en el estilo de vida, ya que se cree que surge por razones aleatorias, pero puede estar relacionada con factores ambientales. Los síntomas principales incluyen altos niveles de glucosa en sangre, sed intensa y hambre. El tratamiento principal para la diabetes tipo 1 es la insulina, que requiere un compromiso constante por parte de los pacientes para monitorear y ajustar sus niveles de glucosa.
La tecnología en salud ha permitido avances significativos en el tratamiento de la diabetes tipo 1, como la bomba de insulina, que calcula la dosis necesaria de insulina de forma automática. A pesar de estos avances, aún existen brechas en el acceso a tratamientos, especialmente en regiones más aisladas. La actualización de la canasta GES para cubrir los últimos avances en medicamentos y dispositivos es una de las necesidades destacadas por Marcelo González, director de la Fundación Mi Diabetes.
La educación sobre la diabetes tipo 1 es fundamental para identificar los síntomas a tiempo y acceder a tratamientos adecuados. Más campañas educativas son necesarias para concienciar sobre esta enfermedad y promover un mejor acceso a tratamientos para aquellos que la padecen.
Con Información de chilelindo.org