Chile fomentará el desarrollo de la construcción naval en Asmar para revitalizar la industria en el Biobío después del cierre de Huachipato.

El Plan de Fortalecimiento Industrial del Biobío es un programa de 32 puntos que busca mitigar los efectos del cierre de la Compañía Siderúrgica Huachipato (CSH) y reactivar la economía de esa zona del país. Una de las medidas contempladas en este plan es impulsar la Política Nacional de Construcción Naval en la planta industrial Talcahuano de Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar).

Esta acción se enmarca en el eje 4 Reactivación y Fortalecimiento de la Industria en el Mediano y Largo Plazo, que tiene como objetivo desarrollar o fortalecer sectores económicos con potencial para dinamizar la producción industrial, generar empleos de calidad y acelerar el tránsito hacia la carbono-neutralidad y resiliencia del sistema productivo regional.

La Política Nacional de Construcción Naval busca avanzar en la construcción nacional de todas las unidades de superficie requeridas por la Armada de Chile. Esto convertirá a la industria naval en un importante generador de empleo, una demanda estable a proveedores locales y un motor de desarrollo de capacidades tecnológicas y productivas.

La primera versión de esta política fue presentada al presidente Gabriel Boric el 3 de julio en la ceremonia de comisionamiento del rompehielos AGB-46 Almirante Viel. Su formalización se espera para fines de 2024 y promoverá una estrategia de alianzas público-privada para fortalecer la industria naval en Chile.

El Plan Nacional Continuo de Construcción Naval representa una iniciativa estratégica para la Armada de Chile, permitiéndole renovar sus buques auxiliares, unidades logísticas y fragatas en lugar de adquirirlas usadas en el extranjero.

Este programa, que busca potenciar la construcción de buques en un horizonte de 50 años, contribuirá a la generación de empleos, investigación, innovación y nuevas empresas, además de dejar una parte significativa de la inversión en Chile. Su concreción permitiría al país dejar de depender de la oferta de buques usados, garantizando una vida útil más larga y una mayor eficacia en costos y mantenimiento.

En este marco, la Armada de Chile ha dado pasos importantes con la construcción del rompehielos AGB-46 Almirante Óscar Viel y el primer buque multipropósito del proyecto Escotillón IV Fase 1, que entrarán en servicio en 2027 y 2030 respectivamente.

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