«Casos como el de Cathy Barriga, acusada por la Fiscalía de establecer una ‘gobernanza fraudulenta’ en Maipú con un perjuicio de más de $30 mil millones, o el de Virginia Reginato, donde una auditoría revela pérdidas de $100 mil millones, destacan la urgencia de implementar cambios en la administración municipal que permitan exponer y corregir el mal manejo de recursos públicos.»
La comuna de La Florida se enfrenta a una elección trascendental que podría marcar un punto de inflexión en su administración municipal. La creciente preocupación entre los vecinos sobre la gestión actual ha puesto de relieve la necesidad de un cambio, en un contexto donde la continuidad parece estar ligada a prácticas cuestionables y a un evidente desgaste en la gestión pública.
El caso de La Florida no es único en la Región Metropolitana. Otros municipios han sido testigos de la necesidad de renovación para asegurar una gestión transparente y efectiva. Ejemplos recientes como Maipú, con la salida de Cathy Barriga, Vitacura con las investigaciones en curso contra Raúl Torrealba, y Las Condes bajo la polémica gestión de Joaquín Lavín y su sucesora, Daniela Peñaloza, subrayan la importancia de un cambio que garantice la probidad y la eficiencia en el uso de los recursos públicos.
En este escenario, Nicolás Hurtado (PC) emerge como una opción para aquellos que buscan una nueva dirección en La Florida. Su campaña se ha centrado en enfrentar los problemas estructurales que la comuna enfrenta en áreas clave como seguridad, educación y desarrollo urbano. Hurtado, ha señalado, que la gestión actual ha priorizado la exposición mediática en lugar de soluciones efectivas, lo que ha llevado a una sensación generalizada de abandono en varios sectores de la comuna.
Uno de los temas más controvertidos que enfrenta Carter hoy, es la permanencia de Manuel Guerra, ex fiscal, quien se encuentra en la mira de la fiscalía por su relación al famoso caso de corrupción liderado por Luis Hermosilla. Guerra continúa recibiendo un millonario sueldo como asesor en la municipalidad. Este caso ha generado preocupación entre los vecinos y ha puesto en tela de juicio la gestión del alcalde Rodolfo Carter, quien ha promovido a Guerra como defensor de la comunidad en casos de alta connotación pública.
Además de los problemas de probidad, la administración actual ha sido criticada por la venta de terrenos municipales, una decisión que, aunque generó ingresos a corto plazo, ha resultado en un aumento significativo de los gastos en arriendos, debilitando las finanzas comunales. La disparidad en la inversión de recursos en distintos sectores de la comuna también ha sido un tema recurrente, evidenciando una gestión desigual y poco equitativa.
La elección en La Florida será crucial para determinar si los vecinos optan por un cambio que promueva una gestión más transparente y orientada a las necesidades reales de la comunidad, o si deciden continuar con la ruta actual, marcada por prácticas que muchos consideran desgastadas y alejadas de los intereses de la ciudadanía. Con un escenario político donde los apoyos a la continuidad son fuertes, la contienda promete ser un reflejo de la demanda de los floridanos por un gobierno local que verdaderamente les represente y responda a sus inquietudes.
