El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha acusado de manera directa a Rusia por un ataque con dron que impactó el sarcófago de protección del reactor de la central nuclear de Chernóbil, ubicada en el norte del país y que en 1986 fue escenario de uno de los peores desastres nucleares de la historia. Moscú ha rechazado las acusaciones sobre este incidente.
Zelenski declaró que “un dron de ataque ruso equipado con una carga explosiva de gran poder alcanzó el sarcófago que protege al mundo de la radiación del cuarto reactor de la central de Chernóbil.”
“Este sarcófago fue erigido por Ucrania y otros países europeos y del mundo, junto con Estados Unidos, todos comprometidos con la verdadera seguridad de la humanidad”, expuso en X. “El único país que lleva a cabo este tipo de ataques, ocupa centrales nucleares y conduce una guerra sin considerar las consecuencias es la Rusia actual”, subrayó.
“Esto representa una amenaza terrorista para el mundo entero”, advirtió el presidente ucraniano, quien confirmó que hubo daños en el sarcófago y aseguró que el incendio ha sido extinguido, aunque el ataque ha dejado “daños significativos”. “Por el momento, los niveles de radiación no se han incrementado y están bajo constante vigilancia”, indicó.
Zelenski enfatizó que “Rusia realiza ataques similares cada noche contra la infraestructura y las ciudades de Ucrania”. “Rusia sigue incrementando su ejército y no muestra señales de cambio en su retórica estatal desquiciada e inhumana”, insistió, antes de agregar que “esto demuestra que (el presidente ruso, Vladimir) Putin no se está preparando para negociar”.
“Se está preparando para engañar al mundo. Es por esto que debe haber una presión unificada de todos aquellos que valoran la vida: presión sobre el agresor. Rusia tiene que rendir cuentas por sus actos”, afirmó.
RUSIA RECHAZA LAS ACUSACIONES
En respuesta, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, desvinculó a las fuerzas rusas del ataque y señaló que, aunque “no tiene información precisa” sobre el incidente, “no puede afirmarse que las tropas de Moscú hayan atacado instalaciones de infraestructura nuclear”.
“Cualquier afirmación a este respecto es falsa”, manifestó, y subrayó que “el Ejército ruso no lleva a cabo tales acciones”, según reportó la agencia rusa de noticias Interfax. “Lo más probable es que estemos ante otra provocación, una falsificación. Es algo que le gusta hacer al régimen de Kiev y a veces no duda en hacerlo”, añadió.
Horas antes, las autoridades prorrusas en la provincia de Zaporiyia ocupada por las tropas de Moscú denunciaron “daños críticos” en el equipo de la planta térmica de Zaporiyia debido a un ataque con artillería llevado a cabo por el Ejército de Ucrania.
Estos hechos se producen dos días después de que Kiev y Moscú intercambiaran acusaciones sobre la suspensión de una rotación de personal del OIEA en la central nuclear de Zaporiyia. Grossi confirmó que la rotación fue cancelada debido a la “intensa actividad militar” en la zona, “a pesar de las garantías por escrito recibidas de ambas partes de que la rotación programada tendría lugar en un contexto de seguridad”.
La central nuclear de Zaporiyia, ubicada en el sur de Ucrania, fue escenario de combates durante las primeras etapas de la guerra en Ucrania y, pocas semanas después, cayó bajo el control de Moscú, que junto a Kiev permite el ingreso de expertos del OIEA a las instalaciones para asegurar su seguridad.
Con Información de www.lanacion.cl