Por: Equipo Factos
La Corte Suprema, con un fallo de tres votos a favor y dos en contra, aceptó el recurso de amparo presentado por la psiquiatra Josefina Huneeus Lagos, anulando las interceptaciones telefónicas que respaldaron las imputaciones en su contra dentro del Caso Convenios. Esta decisión, que se dio a conocer el martes, no solo beneficia a Huneeus, sino que también genera dudas sobre la actuación de los fiscales y el control que ejercen los jueces sobre posibles abusos.
El fallo critica duramente la legalidad de las escuchas realizadas por la Fiscalía de Antofagasta al teléfono que, inicialmente, pertenecía a Alberto Larraín, director de la “Fundación Procultura”. La investigación reveló que este número era utilizado por Huneeus Lagos, cercana amiga del presidente Gabriel Boric, y que sus comunicaciones fueron intervenidas sin la autorización expresa del tribunal.
Los jueces mayoritarios concluyeron que hubo una clara violación de derechos fundamentales y que la Fiscalía no acató los criterios necesarios para llevar a cabo una diligencia excepcional como la interceptación telefónica. Según el fallo, tales escuchas “no cumplieron con dichos criterios” y su realización “es ilegal”.
El verdadero punto de quiebre en esta resolución se encuentra en los votos disidentes.
Los votos en contra: Letelier y Valderrama
Los ministros que se opusieron al amparo —María Teresa Letelier y Manuel Antonio Valderrama— defendieron que la interceptación era válida, ya que la línea telefónica intervenida estaba vinculada comercialmente a Larraín y que las conversaciones de Huneeus eran pertinentes para la investigación, lo cual podría llevar a su reclasificación como imputada.
No obstante, esta perspectiva contrasta con la opinión mayoritaria del pleno, que sostuvo que la Fiscalía no podía emplear “subterfugios” para justificar una escucha que no fue solicitada ni autorizada adecuadamente.
Es importante señalar que ambos jueces han sido mencionados en reportajes como cercanos al abogado Luis Hermosilla, quien está actualmente imputado por tráfico de influencias, sobornos y filtración de información privilegiada.
| El ministro Valderrama fue mencionado en el “Caso Audios”, donde se revelaron conversaciones entre Hermosilla y jueces en funciones. A pesar de que se inició un sumario en su contra —por iniciativa del propio Valderrama—, este se cerró sin sanciones, generando una sensación de impunidad.
| Por su parte, Letelier recibió críticas del pleno de la Corte Suprema por su papel en los esfuerzos que, supuestamente, habría realizado Hermosilla para su nombramiento como ministra. A inicios de este año, se hizo público que Letelier había intercedido a favor del exjuez Antonio Ulloa, un colaborador clave de Hermosilla en el Poder Judicial.
¿Un fallo político disfrazado de legalidad?
Aunque el fallo favorable a Huneeus se fundamenta en sólidos argumentos jurídicos relacionados con la protección de derechos fundamentales y las garantías del debido proceso, la resistencia de algunos miembros de la sala a reconocer el exceso de la Fiscalía plantea una preocupación inquietante: ¿qué grado de autonomía tiene realmente el Ministerio Público si los jueces que deben supervisarlo están vinculados por redes de confianza?
El resultado de 3-2 no solo representa una decisión judicial. Es indicativo de que las tensiones internas en la Corte Suprema —y sus posibles conexiones con casos de alto perfil como el de Hermosilla— continúan influyendo en decisiones cruciales.
Por lo tanto, este fallo podría establecer un precedente importante: no solo al limitar los abusos en las interceptaciones telefónicas, sino también al recordar que, incluso en las instancias más altas del poder judicial, la imparcialidad no debe darse por descontada.
Con Información de factos.cl