El ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, declaró que la denuncia interpuesta bajo la nueva Ley Antiterrorista en relación al ataque a la central hidroeléctrica Rucalhue es una medida que comunica un mensaje simbólico, político y jurídico a los responsables de estos actos.
En una entrevista con Radio Pauta, Cordero expuso que “la aplicación de esta ley representa una de las acciones más drásticas del Estado en este contexto. Es un aviso que no solo es simbólico y político, sino también jurídico, dirigido a quienes están llevando a cabo estos delitos”.
El ministro también se refirió al Estado de Excepción en la Macrozona Sur, destacando “la notable disminución de los incidentes violentos”, aunque advirtió que “actos como el de Rucalhue tienen el objetivo de infundir miedo en la población, lo que demanda una respuesta firme por parte del Estado”.
En respuesta a las críticas de la oposición, Cordero enfatizó “la necesidad de asegurar el éxito de la investigación, de aplicar la Ley Antiterrorista con rigor y de mantener la efectividad del Estado de Excepción”.
Además, el ministro anunció que visitará la zona en los próximos días y anunció que se reunirá con el consorcio chino afectado “para discutir los planes de seguridad relacionados con el proyecto”.
También confirmó que habló con la empresa el lunes pasado y le transmitió que “lo que le interesa al Estado de Chile es la continuidad de dicho proyecto de inversión”.
Luego del atentado, el consorcio chino expresó sus inquietudes sobre la falta de seguridad para avanzar con el proyecto que implica una inversión de 350 millones de dólares en la comuna de Santa Bárbara, Región del Biobío.
Con Información de www.lanacion.cl