El 29 de junio se llevarán a cabo las primarias, donde se definirá el candidato del progresismo para enfrentar a la derecha, que actualmente parece estar en una lucha interna, con el ultraderechista José Antonio Kast alzando la voz.
En la derecha se dan por seguros de su victoria. Muchos consideran que en la segunda vuelta los contendientes serán Matthei y Kast, excluyendo a Johannes Kaiser, quien ha perdido terreno en las encuestas a medida que Kast avanza. Sin embargo, Kaiser, que se define como libertario, continúa insistiendo en su candidatura.
El presidente de la UDI, Guillermo Ramírez, ha instado a la calma. Explicó que, tras la primaria de la oposición, cuando un único candidato surja del espectro progresista, la competencia se volverá difícil. Afirmó que esta es una elección compleja que requerirá esfuerzo para ganar, tanto en relación con Kast como en el contexto de la lucha contra la izquierda.
A diferencia de las visiones pesimistas de algunos analistas de la derecha, Ramírez destacó que la izquierda, incluso en situaciones adversas, sabe reagruparse y pelear.
Por otro lado, se rumorea sobre un ajuste en el equipo de campaña de Matthei, debido a la creciente popularidad de Kast. Los analistas creen que el largo periodo de campaña de Matthei podría estar generando desgaste en su imagen. El mensaje de su reciente spot político ha sido confuso, mostrando dos caras de la candidata que podrían no resonar con los votantes.
La percepción de la candidata es de confusión, dado que no se manifiesta una línea ideológica clara. A pesar de asegurar que su campaña apenas comienza, sus apoyos podrían depender del desempeño de Kast.
Expertos coinciden en que el resultado de la elección presidencial estará en manos de 6 a 7 millones de votantes, lo que deja un futuro incierto y diversas proyecciones en el aire.
Una candidata contra las cuerdas
José Antonio Kast ha puesto a Matthei en una posición complicada, mientras ella parece buscar temas para criticar al gobierno sin mucho éxito. Kast, por su parte, ha aprendido de experiencias anteriores y está efectivo en conectar con la ciudadanía.
Recientemente, Kast participó en un foro sobre tecnología e inteligencia artificial, donde se reunió con una población joven que ahora se prepara para votar. Desde su equipo afirman que su crecimiento se debe a su capacidad de acercarse a la gente y a su enfoque en temas de seguridad, inmigración y economía. Se está enfocando en dejar las polémicas para otros, mientras presenta propuestas concretas para atraer a un electorado más joven y activo en redes sociales.
¿Qué pasa con el oficialismo?
Patricia, una periodista de izquierda, expresa su preocupación por la posibilidad de que las derechas, a pesar de su oscuro pasado, recuperen el poder. Las encuestas muestran que Kast goza de un fuerte apoyo entre los jóvenes, dejando a Matthei en un distante segundo lugar.
Particularmente alarmante es el alto porcentaje de chilenos indecisos, que supera el 66%, mostrando una falta de interés en las opciones políticas y una desconfianza hacia los partidos. Este escenario ha generado nerviosismo entre los candidatos oficialistas, quienes se ven forzados a delinear sus diferencias mientras el clima se vuelve tenso.
Si las primarias se llevaran a cabo mañana, el resultado seguiría siendo incierto. Existe el temor de que el apoyo a algunas candidaturas de la izquierda disminuya dependiendo de quién gane.
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