La ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) se ha consagrado como la gran vencedora de las elecciones del domingo, superada únicamente por la Unión Democristiana (CDU) de Friedrich Merz, que ocupó el segundo lugar con el 20,8% de los votos, destacando especialmente en los territorios de la antigua República Democrática Alemana.
Este es el mejor resultado obtenido por un partido ultraderechista en Alemania en unas elecciones desde la era nazi, impulsado principalmente por su éxito en los cinco estados que antiguamente conformaron Alemania comunista, a excepción de la zona oriental de Berlín, donde La Izquierda se impuso.
En los estados federados de Brandeburgo, Turingia, Sajonia, Sajonia-Anhalt y Mecklemburgo-Pomerania Occidental, la AfD ha logrado mayorías abrumadoras que varían entre el 32,5% y el 38,6% de los votos.
Los resultados también indican que la AfD ha tenido un mejor desempeño en las áreas rurales y en ciudades más pequeñas en todo el país, mientras que su apoyo en las grandes urbes ha sido inferior, lo que podría explicar su fortaleza en la antigua zona oriental, menos densamente poblada.
Tino Chrupalla, co-líder de la AfD, ha señalado que este «sensacional» resultado evidencia que los alemanes ya no desean el «cortafuegos» que representaría una coalición hipotética entre conservadores y socialdemócratas, expresando su confianza en alcanzar mayores porcentajes en futuras elecciones.
«Los que establecen cortafuegos se frían detrás de ellos; el señor Merz también lo verá», comentó este lunes en una entrevista con la radiotelevisión pública ARD, anticipando que su partido se convertirá en la principal fuerza de oposición, luego de que la CDU desestimara cualquier posibilidad de acuerdo.
Impulsados por estos resultados, Chrupalla y su compañera, Alice Weidel, quien fue la candidata a canciller de la ultraderecha en estas elecciones, tienen planes de presentar su candidatura para liderar el partido en el Bundestag, la Cámara Baja del Parlamento alemán.
Al igual que Chrupalla, Weidel se muestra optimista sobre la posibilidad de superar a la CDU en las siguientes elecciones de 2029. Mientras tanto, han recibido felicitaciones de líderes europeos como el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, así como de altos funcionarios de la Casa Blanca, incluido Elon Musk.
Weidel mencionó este lunes haber despertado con varias llamadas perdidas desde Estados Unidos, incluyendo una de Musk, quien ha manifestado su simpatía hacia la ultraderecha alemana, participando incluso en actos de campaña.
Con Información de www.elperiodista.cl