En paralelo a las diversas actividades organizadas para la bienvenida e introducción de los nuevos estudiantes, la primera cohorte de jóvenes que comenzarán sus estudios en las carreras de la Industria Creativa de la PUCV se congregó en el edificio correspondiente, situado en la avenida Altamirano de Valparaíso.
Esta generación está compuesta por más de mil matriculados que se formarán en áreas como Animación Digital, Desarrollo de Videojuegos y Simulación Virtual, Publicidad, Fotografía Profesional, Ilustración y Producción Musical. Las instalaciones han sido recientemente actualizadas para ofrecer una educación enfocada en el aprendizaje y la creación a través del desarrollo creativo.
Durante este evento, los nuevos estudiantes tuvieron la oportunidad de conocer a sus docentes, directores de carrera y al personal del edificio, quienes les dieron la bienvenida en una ceremonia realizada en el auditorio del lugar y luego llevaron a cabo un recorrido por las instalaciones.
Claudia Mejías, vicerrectora académica de la universidad, destacó que las carreras del Programa Interdisciplinario de Formación Profesional (PIFP), cuyas clases comienzan la próxima semana, “incorporan elementos de innovación y emprendimiento. El objetivo es ofrecer una formación multidisciplinaria que capacite a los profesionales para generar contenidos en la Industria Creativa y facilitar su rápida inserción en el mercado laboral”.
Luis Villarroel, director del PIFP, resaltó que desde la PUCV se están sentando las bases para fortalecer la economía creativa del país.
“El lanzamiento de seis nuevas carreras tiene como propósito dinamizar la economía creativa, que representa una nueva vía para potenciar la producción industrial mediante la tecnología, utilizando la creatividad y el talento de las personas en la creación de bienes y servicios, desde Valparaíso, contribuyendo a los sectores cinematográfico, televisivo, publicitario y de videojuegos”.
Renzo Soto, académico de la carrera de Animación Digital, enseñará asignaturas como Dibujo y Fundamentos de la Animación, que “ofrecerán un amplio espectro de imaginación desde la perspectiva audiovisual, para desarrollar contenidos con un enfoque regional. Además, se incorporará la gestión de proyectos interculturales para que los estudiantes apliquen sus conocimientos en proyectos en marcha”.
Paula Espina, jefa de las carreras de Ilustración y Animación Digital, explicó que el inicio de clases en la PUCV “fortalecerá el trabajo actual en las culturas y las artes a través de la profesionalización de estas carreras”. Por su parte, Sebastián Díaz, jefe de carrera de Desarrollo de Videojuegos y Simulación Virtual, agregó que “profesionalizar y aportar valor a todas las áreas que se interrelacionan en el desarrollo de videojuegos en la industria potenciará aún más este sector”.
NUEVOS HORIZONTES
Tamara Neumann, estudiante de Fotografía Profesional, se unió a la PUCV a los 23 años. Se trasladó desde Puyehue, en la provincia de Osorno, para estudiar esta nueva carrera tras haber trabajado en geología durante dos años y haber entrenado como instructora de esquí, buscando convertir su pasatiempo en una profesión.
“Siempre he tenido el deseo de profundizar en mis conocimientos, y por eso vi en la PUCV una nueva oportunidad para iniciar un camino que realmente me apasiona. Me encanta documentar lo que sucede a mi alrededor y en esta etapa quiero combinar la fotografía con la instrucción para desarrollarme profesionalmente en el deporte”.
Josefa Correa, de 20 años, dejó el bullicio de la capital para mudarse a Viña del Mar y estudiar Publicidad. Tras haber cursado algunos semestres de la carrera de Interpretación Inglés–Español en Santiago, eligió la PUCV por la excelencia académica de la institución.
“Desde Santiago siempre me atrajo esta universidad por su prestigio. Además, es fascinante estar frente al mar y conectar con un entorno natural que me permite ver las cosas desde otra perspectiva. La PUCV tiene un área creativa muy sólida, y lo completo de la carrera, junto con su énfasis en la creatividad personal, me entusiasma mucho”.
Sebastián Valenzuela, de 18 años, también dio un giro en su vida al inscribirse en la nueva carrera de Producción Musical. Desde Curicó, decidió mudarse a Valparaíso, dejando atrás su carrera como técnico en programación.
“Estaba intentando aprender a producir música por mi cuenta, pero necesitaba un método de aprendizaje estructurado con un profesor. Así, investigué las opciones disponibles y descubrí que la PUCV abría la carrera. Sin duda, es la mejor oportunidad que tengo porque quiero sobresalir, salir de Chile y explorar el mundo produciendo música, y esta universidad ofrece muchas oportunidades de intercambio en distintos países. Estoy enfrentando muchos desafíos nuevos y es muy gratificante asumirlos”.
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Con Información de osornoenlared.cl
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