Las vacaciones han llegado a su fin y los estudiantes han regresado a las aulas. Muchos están entusiasmados por reencontrarse con sus amigos, mientras que otros experimentan cierta ansiedad al tener que dejar atrás el descanso y concentrarse nuevamente en sus estudios.
El retorno al año escolar implica la necesidad de ajustar los horarios. Por eso, uno de los consejos principales de los expertos es que los alumnos comiencen a regular su ciclo de sueño para facilitar el levantarse temprano.
Verónica López, profesora de la Escuela de Psicología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y directora del Centro de Investigación para la Educación Inclusiva, subraya que, además de organizar los horarios, es crucial anticipar lo que será el nuevo año escolar. Esto significa pensar en aspectos como “en qué curso estarás, cómo será el patio, cómo imaginas que será tu profesor o profesora, y reconectar con compañeros con los que compartes intereses”.
“La anticipación de los espacios es siempre importante, especialmente para aquellos estudiantes con necesidades educativas especiales. En su caso, es esencial que esta anticipación sea concreta y comience un poco antes, sobre todo si ingresarán a un entorno nuevo o cambiarán de ciclo o sala de clases”, añadió.
Verónica también enfatizó el papel fundamental que juegan los docentes y la institución educativa al inicio del nuevo año escolar. En este sentido, destacó que es vital que los alumnos se sientan bienvenidos y que los profesores fortalezcan el vínculo pedagógico para fomentar el sentido de pertenencia, la motivación hacia el aprendizaje y el compromiso escolar.
“Las jornadas de bienvenida y cualquier actividad que haga sentir a los niños que el colegio los esperaba de regreso son sumamente significativas. Es esencial que se sientan reconocidos por su nombre. Esto es especialmente importante para aquellos niños que están atravesando cambios de género, donde el uso del nombre social tiene gran relevancia. En general, las prácticas de recibimiento son muy apreciadas no solo por los estudiantes, sino también por sus familias”, concluyó.
Este artículo fue publicado originalmente en Osorno en la Red.
Con información de osornoenlared.cl
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