El Juzgado de Garantía ha admitido una querella presentada por la Aduana Regional de San Antonio en contra de una empresa que intentó importar 189 katanas y 6 espadas a través de un embarque marítimo.
La importación de cualquier artículo vinculado a las artes marciales en Chile requiere obligatoriamente la autorización de la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN), algo que no se cumplió en este caso.
Según informaciones de Aduanas, se vulneró la normativa al declarar 165 de estas armas solamente como elementos de cosplay o disfraces, a pesar de que estaban fabricadas con una sólida hoja de metal.
En la Declaración de Ingreso, se intentó justificar su importación describiéndolas como “parte de disfraz (cosplay), para uso en fiestas, de plástico, Partida 9505.9000”. Además, la querella también menciona que, durante el aforo físico (inspección de la carga), los fiscalizadores encontraron que el importador no había declarado otras 24 katanas y 6 espadas.
INFORMACIÓN SOBRE LA QUERELLA
La querella de Aduanas indica que estas mercancías, clasificadas como armas blancas con filo y corto punzante, representan un riesgo para la seguridad pública. Por esta razón, necesitan registros y autorizaciones especiales para su ingreso, comercialización y uso en el país.
Asimismo, el documento destaca que las mercancías no declaradas son también armas blancas que requieren que sus importadores estén registrados ante la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN), cosa que no se cumplió en esta ocasión, constituyendo un delito de contrabando.
De acuerdo a la Ley Nº 18.356 sobre control de las artes marciales, el artículo 1° establece que “todas las personas naturales o jurídicas, chilenas o extranjeras, que realicen actividades relacionadas con las artes marciales o con los implementos destinados a ellas, estarán sujetas a las normas de esta ley”.
Con Información de www.lanacion.cl