El Gobierno de Perú ha prolongado por 30 días más el estado de emergencia en Lima y Callao, con el objetivo de abordar el creciente problema de criminalidad que ha azotado estas ciudades en los últimos meses. Como parte de estas medidas, se prohibirá a los conductores de motos llevar acompañantes, con el fin de reducir los ataques armados que ya han dejado un saldo trágico de muertos.
Además, los motociclistas no podrán utilizar ningún «elemento o accesorio adicional» al casco que impida su identificación, según establece el decreto aprobado por la presidenta Dina Boluarte. Esta normativa no afecta a las fuerzas de seguridad ni a otros funcionarios, pero sí impacta a los numerosos servicios de mototaxi que operan en la región.
A pesar de la persistente ola de criminalidad que afecta principalmente a transportistas y comerciantes, el Gobierno ha decidido mantener el estado de emergencia, aunque la presencia militar y las restricciones a ciertos derechos no han logrado frenar la violencia. Según la Policía, durante el primer trimestre de 2025 se ha registrado un incremento en las denuncias por extorsión.
Hoy, sindicatos y organizaciones de transportistas han convocado a una huelga general en todo el país, tras las movilizaciones ocurridas la semana pasada en Lima y Callao, las zonas más afectadas por la delincuencia.
«Los asesinatos de chóferes siguen ocurriendo. Por este motivo, hemos decidido realizar un paro nacional el 14 de mayo. Muchas asociaciones nos han ofrecido su respaldo», declaró Walter Carrera Álvarez, presidente de la Asociación de Transportistas Nacionales e Internacionales (Asotrani), en una entrevista con el diario ‘La República’.
La semana pasada, el Congreso también declaró el estado de emergencia en la Policía para poder intervenir en la institución y fortalecer las capacidades de sus agentes. Esta medida incluye un plan de reestructuración que afectará al Ministerio del Interior, que ha tenido siete titulares en poco más de dos años.
Con Información de www.elperiodista.cl