La Procuraduría General de Brasil presentó este martes una denuncia contra el expresidente Jair Bolsonaro, acusándolo de participar en la orquestación de un golpe de Estado contra Luis Inácio Lula da Silva, tras las elecciones de 2022. Según la fiscalía, el líder ultraderechista habría incluso planificado asesinar al actual mandatario mediante envenenamiento para impedir su ascenso al poder.
La denuncia fue realizada por el Procurador General de la República, Paulo Gonet, ante el Tribunal Supremo Federal de Brasil, señalando a 34 individuos como cómplices en el intento de derrocamiento de Lula da Silva, incluyendo al exministro de Defensa Walter Braga Netto.
La acusación menciona que los implicados idearon un plan de ataque a las instituciones brasileñas conocido como «Puñal Verde Amarillo», en referencia a los colores de la bandera, cuyo objetivo era generar un clima de conmoción social que obligara a la intervención militar.
En el marco de esta estrategia, los conspiradores realizaron seguimientos sobre el juez Alexandre de Moraes, miembro del Tribunal Supremo, y el presidente Luiz Inácio Lula da Silva. En relación al primero, se consideró el uso de armamento bélico, mientras que para Lula se llegó a proyectar su asesinato mediante envenenamiento.
Si hubieran tenido éxito, los militares y ministros de Bolsonaro involucrados en la operación habrían conseguido un control absoluto sobre los tres poderes del Estado, estableciendo un gabinete central que podría implementar un nuevo orden sin Lula da Silva.
«Este plan fue concebido y presentado al presidente de la República (Bolsonaro), quien lo aceptó», indica la denuncia.
Entre los cargos que enfrenta Bolsonaro se encuentran el intento de golpe de Estado, «la tentativa de abolición violenta del Estado democrático de derecho» y su participación en una «organización criminal armada», lo que podría resultar en una pena de entre 12 y 40 años de prisión.
Con Información de www.elciudadano.com