El plan para la expansión del aeropuerto contempla una tercera pista, un nuevo terminal y un tren ligero, con capacidad para 84 millones de pasajeros al año.
El Ministerio de Obras Públicas (MOP) ha revelado un ambicioso proyecto para ampliar el Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AMB) en Santiago, con el objetivo de triplicar su capacidad actual y alcanzar los 84 millones de pasajeros anuales para el 2050. La propuesta incluye la construcción de una tercera pista, un nuevo terminal de pasajeros, áreas de carga, accesos viales y un tren ligero para mejorar la conectividad dentro del aeropuerto.
La ministra de Obras Públicas, Jessica López, junto con el subsecretario Danilo Núñez y la directora nacional de Aeropuertos, Claudia Silva, dieron a conocer este proyecto. Afirmaron que la ampliación permitirá duplicar la superficie actual del aeropuerto, en respuesta a un aumento constante en la demanda aérea, que ha crecido cerca del 10% anual desde 2010, excluyendo el período pandémico.
Entre las principales obras destaca la creación de un nuevo terminal de carga, tres nuevos accesos y un tren ligero que facilitará el desplazamiento de los pasajeros. Además, se erigirá un tercer terminal de pasajeros, una pista adicional y nuevas instalaciones para el mantenimiento de aeronaves, así como para la Dirección General de Aeronáutica Civil.
“El proyecto se encuentra en la fase de licitación de su diseño básico, lo que permitirá definir de manera más precisa los plazos, presupuestos y etapas del proceso. Aumentar la capacidad de carga aérea del AMB será una de nuestras prioridades”, enfatizó la ministra López.
La planificación se realizó como parte del nuevo Plan Maestro del Aeropuerto de Santiago, que optó por ampliar el aeropuerto existente en vez de construir uno nuevo en la macrozona centro, al considerarse más eficiente desde una perspectiva económica, operativa y social.
La expansión implicará duplicar la superficie del aeropuerto, aumentando de 1,070 a 2,368 hectáreas, principalmente en la comuna de Pudahuel y en menor medida en Lampa. La superficie construida superará el millón de metros cuadrados, y el número de estacionamientos para aeronaves se incrementará de 56 a 152.
En términos de movilidad urbana, el proyecto contempla tres nuevos accesos: uno al poniente (Camino El Noviciado), otro al norte (Camino Lo Boza) y un acceso exclusivo para camiones hacia el sur. También se habilitará una conexión con la red del Metro de Santiago a través de un tren ligero que recorrerá el interior del aeropuerto.
Además, se llevarán a cabo mejoras urbanas y medioambientales, como áreas verdes perimetrales, multicanchas y espacios públicos que fomentarán la integración del aeropuerto con la ciudad. Se prevé implementar energías renovables y estrategias de eficiencia para lograr la Certificación de Edificio Sustentable (CES), incluyendo sistemas para reducir residuos y emisiones de gases de efecto invernadero.
Con una inversión estimada de 4 mil millones de dólares, el plan de ampliación del Aeropuerto de Santiago se desarrollará entre 2035 y 2050. La fase actual de consultoría se extenderá hasta 2030 e incluirá un estudio de impacto ambiental, expropiaciones y el diseño detallado de ingeniería, poniendo así las bases para que las primeras obras comiencen a mediados de la próxima década.
Con Información de chilelindo.org