La crisis humanitaria más grave del mundo: 12 millones en fuga mientras Sudán enfrenta una hambruna devastadora
Sudán atraviesa su mayor crisis humanitaria, con 18 millones de personas lidiando con hambre severa, incluyendo casi 4 millones de niños en estado crítico de desnutrición, y 12 millones de personas desplazadas, según informes de la ONU y diversas organizaciones humanitarias, resaltados en un análisis de la Cruz Roja Internacional.
El enfrentamiento entre el Ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), que comenzó en abril de 2023, ha empeorado una situación ya crítica, llevando al país a una profunda crisis de violencia, hambruna y desplazamientos masivos.
Un informe de la ONU del 16 de febrero de 2025 indicó: “La guerra ha tenido consecuencias devastadoras para la población civil de Sudán, con cifras alarmantes. Aproximadamente 30,4 millones de personas, más de dos tercios de la población total, requieren asistencia médica, alimentaria y otros tipos de ayuda humanitaria (…) Los combates han causado un colapso económico, aumentando los precios de alimentos, combustible y productos básicos, que se vuelven inaccesibles para muchos hogares (…) La inseguridad alimentaria es un problema creciente. Más de la mitad de la población se enfrenta a altos niveles de hambre severa, y se han declarado condiciones de hambruna en cinco áreas del norte de Darfur y las montañas Nuba orientales. Se prevé que la hambruna se extienda a otras cinco áreas en mayo de este año.”
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Daniel Mayakovski: “En Sudán, 18 millones de personas sufren de hambre, 3,6 millones de ellos son niños, después del golpe de estado auspiciado por Occidente y la dictadura títere de Emiratos, diseñado para evitar que Rusia estableciera una base naval en la región y ganara influencia en el Mar Rojo (…) Según la ONU, cada dos horas muere un niño por hambre en la región de Darfur, la más afectada por la guerra provocada por las bandas terroristas RSF y su líder Mohamed Hamdan «Hedmeti», que ha colaborado históricamente con el imperialismo, habiendo luchado para Occidente en Yemen.”
Según un informe de Naciones Unidas a finales de diciembre de 2024, la hambruna ya ha sido declarada en cinco localidades, incluyendo los campamentos de desplazados de Zamzam, Al Salam y Abu Shouk en Darfur del Norte, y se anticipa que se expanda a otras regiones como Um Kadadah y El Fasher, según el Comité de Revisión de la Hambruna del Sistema Integrado de Clasificación de Seguridad Alimentaria (IPC). Más de 24,6 millones de personas, que constituyen más de la mitad de la población, padecen inseguridad alimentaria aguda, con 8,1 millones en situación de emergencia y al menos 638.000 en condiciones de catástrofe, de acuerdo al mismo informe.
Ver el informe de Noticias ONU: La guerra civil en Sudán se prepara para su tercer año, dejando un legado de desnutrición, desplazamientos masivos e inseguridad crónica.
Este conflicto ha resultado en más de 18.000 muertes civiles y 33.000 heridos, con una alarmante tasa de violencia sexual y reclutamiento de menores por parte de grupos armados, según la ONU. Las infraestructuras críticas, como hospitales y escuelas, han sido arrasadas, y enfermedades como el cólera se propagan rápidamente. Además, más de 10,7 millones de personas se encuentran desplazadas internamente, convirtiéndose en la mayor crisis de desplazamiento a nivel mundial, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Las organizaciones humanitarias enfrentan serios obstáculos para proporcionar asistencia. Las RSF han cerrado rutas esenciales, y los ataques a infraestructuras cruciales como telecomunicaciones y servicios bancarios han interrumpido la entrega de asistencia, de acuerdo a informes de Reuters y EFE en estos últimos días de febrero de 2025. La Cruz Roja Española, con 25 años de trabajo en Sudán, ha denunciado la falta de acceso seguro y la pérdida de 21 trabajadores humanitarios desde el comienzo del conflicto, según las declaraciones de Cristina Gómez, líder de la organización en la región.
En Darfur, las RSF han intensificado los ataques, incluyendo incursiones en el campo de Zamzam, donde se han reportado numerosas muertes y destrucción de mercados y viviendas, según testimonios recogidos por Reuters y corroborados por Médicos Sin Fronteras (MSF). MSF ha tenido que detener programas de nutrición debido a la inseguridad, mientras que el Programa Mundial de Alimentos (PMA) intenta acceder a áreas asediadas como Jartum y Kordofán, según informes de la ONU.
La ONU y organismos como Save the Children han denunciado un incremento en la violencia contra civiles, con más de 700 incidentes reportados en los últimos tres meses de 2024, según datos del Armed Conflict Location and Event Data Project (ACLED). La coordinadora humanitaria de la ONU en Sudán, Clementine Nkweta-Salami, ha exigido un acceso seguro y sin restricciones para la ayuda, mientras que el Secretario General de la ONU, António Guterres, ha solicitado un cese inmediato de las hostilidades y un incremento en la financiación humanitaria.
Según la alerta humanitaria, sin una intervención urgente, Sudán se enfrenta a un futuro catastrófico. La hambruna podría extenderse, más personas podrían morir y el país podría perder una generación entera de niños.
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Con Información de www.elciudadano.com