Cada 22 de marzo, se conmemora el Día Mundial del Agua, un momento para crear conciencia sobre la crucial importancia de este recurso y la necesidad de garantizar su acceso para toda la población. Sin embargo, en varias áreas rurales de Chile, el simple acto de abrir la llave y obtener agua potable y segura sigue siendo un desafío cotidiano.
En La Estrella, una comuna ubicada en la Región de O’Higgins, más de 3.000 personas viven esta realidad a diario. El agua que llega a sus hogares es altamente turbia, con un alto contenido de hierro y manganeso, lo que resulta en un líquido oscurecido y sedimentado que a menudo no es apto para el consumo. Además, la infraestructura sanitaria está en mal estado, ya que la red de distribución fue instalada a finales de los años 60 y no ha sido renovada, lo que ocasiona cortes de suministro y deteriora la calidad del agua potable.
Para abordar esta problemática, la Universidad de O’Higgins (UOH) ha lanzado el proyecto “Modelo de gestión para sistemas sanitarios rurales”, financiado por el Gobierno Regional de O’Higgins a través del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC). “Esta iniciativa no solo tiene como objetivo mejorar la calidad del agua en La Estrella, sino también diseñar un modelo de gestión que pueda ser replicado en otras comunas con problemas similares. Estamos satisfechos de respaldar este proyecto que contribuye a la protección del agua. Somos conscientes de que se requieren medidas urgentes, por ello promovemos iniciativas que favorezcan la conservación de este recurso esencial para nuestra comunidad”, declaró el Gobernador Regional, Pablo Silva Amaya.
Tecnología y gestión para transformar el acceso al agua
Esta iniciativa, liderada por la académica de la UOH Carolina Reyes, se enfoca en la innovación en el tratamiento del agua y la gestión de sistemas sanitarios rurales. El proyecto ha establecido un sistema de monitoreo en tiempo real, que permite detectar cambios en la calidad del agua y optimizar su gestión. Asimismo, se procederá a instalar filtros de ósmosis inversa en escuelas y centros de salud, asegurando que estudiantes y pacientes tengan acceso a agua potable de mejor calidad.
Uno de los aspectos más innovadores de este proyecto es la implementación de un sistema piloto de nanofiltración, que evaluará la viabilidad de reutilizar el agua tratada para la agricultura o la recarga de acuíferos. En el contexto actual de sequía, que ha reducido considerablemente las fuentes de agua, estas soluciones pueden ser fundamentales para la seguridad hídrica de las comunidades rurales.
“Nuestra meta es aplicar un modelo de gestión eficiente que mejore la calidad del agua potable en La Estrella y, al mismo tiempo, desarrolle soluciones que puedan replicarse en otros municipios rurales. Comprendemos que la crisis hídrica no es un problema aislado ni de corto plazo; la innovación es clave para asegurar el acceso al agua en estas zonas”, explicó la Dra. Carolina Reyes, coordinadora del proyecto e investigadora de la Universidad de O’Higgins.
La gestión del recurso hídrico también plantea un desafío en términos administrativos. Por ello, el proyecto incluye un programa de capacitación para los operadores de los sistemas de agua potable y saneamiento, brindándoles herramientas para mejorar el control del suministro, prevenir fallas y optimizar el uso de la infraestructura sanitaria.
Una realidad que impacta la vida cotidiana de la comunidad
Para los habitantes de La Estrella, este proyecto representa una esperanza para resolver un problema que ha afectado su vida cotidiana durante años. Fernando Cáceres, vecino del sector, comenta que el agua turbia se ha convertido en un inconveniente frecuente. “Cuando saco agua para hervir, sale marrón y con sedimentos. Es arriesgado consumirla y también es un problema para lavar ropa, ya que la deja manchada. Cuando voy a pagar por el agua al comité, traigo botellas con el líquido que sale de la llave para que vean si es potable,” relata.
Frente a la incertidumbre sobre la calidad del agua, muchas familias optan por comprar agua embotellada, lo que representa un gasto adicional que no todos pueden afrontar. Héctor Osorio, presidente de la cooperativa de agua potable rural, argumenta que esta opción solo satisface las necesidades de consumo humano, pero no soluciona problemas relacionados con la higiene y el lavado en hogares, escuelas y centros de salud.
Día del Agua: un llamado a la acción
El Día Mundial del Agua no solo busca crear conciencia sobre la importancia de este recurso, sino que también representa una oportunidad para destacar iniciativas que están marcando la diferencia en la gestión del agua potable. El proyecto de la Universidad de O’Higgins en La Estrella es un claro ejemplo de cómo la innovación y la tecnología pueden cambiar la vida de comunidades rurales que históricamente han tenido un acceso limitado al agua.
En un país donde la sequía y el cambio climático han ocasionado una crisis hídrica sin precedentes, avanzar hacia soluciones efectivas es fundamental. La reutilización del agua, la modernización de los sistemas sanitarios rurales y la capacitación en gestión hídrica son estrategias cruciales para enfrentar este desafío.
Garantizar el acceso al agua potable no debería depender de la situación económica de las familias ni de la ubicación geográfica de una comunidad; debe ser un derecho universal. En La Estrella, gracias a la ciencia y la innovación, se están realizando esfuerzos para transformar esta realidad, estableciendo un precedente que podría replicarse en otras comunas de Chile.
El artículo Día del Agua: La innovación como clave para garantizar agua potable en zonas rurales apareció primero en Osorno en la Red.
Con Información de osornoenlared.cl
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