Es evidente que la cuestión de Ucrania, en su esencia, es un asunto bilateral, ya que tanto rusos como ucranianos son las víctimas de este conflicto, pero la sorpresa se manifiesta entre Rusia y Estados Unidos, no precisamente con el invadido, quien ha sufrido la más devastadora de las destrucciones, para el que se han violado todas las normas sobre la inviolabilidad de las fronteras, los acuerdos de seguridad y, de hecho, se han conculcado las leyes internacionales relativas a los conflictos armados y la acción humanitaria, lo que ha llevado a la Corte Penal Internacional a reclamar a los responsables rusos.
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