El buque de investigación AGS-61 Cabo de Hornos de la Armada de Chile realizó un traslado sin precedentes de profesores, estudiantes y funcionarios públicos desde Valparaíso hacia el Archipiélago de Juan Fernández, facilitando así su regreso tras el receso estival. Además, el buque transportó carga esencial para la comunidad local.
Este despliegue pone de manifiesto la importancia de la institución en la conectividad y el bienestar de las comunidades remotas, asegurando el transporte de personas y bienes, así como brindando el apoyo necesario para el desarrollo de la vida en el Archipiélago de Juan Fernández.
De acuerdo con la Armada de Chile, para llevar a cabo esta travesía, la unidad, diseñada para investigaciones oceanográficas, realizó varias adaptaciones con el fin de garantizar la seguridad de los pasajeros, fortaleciendo el lazo entre la Armada y la comunidad, que tuvo la oportunidad de conocer de cerca las capacidades del buque.
El comandante del AGS-61 Cabo de Hornos, capitán de fragata Sergio Swett, comentó que “el respaldo a la gestión del estado, especialmente en las áreas aisladas, permite establecer un vínculo significativo con la comunidad isleña, que, gracias a sus condiciones insulares, comparte una filosofía de vida que se asemeja a la de los marinos embarcados”.
Asimismo, añadió que “nuestro objetivo es abrir el buque a la comunidad y, durante nuestra breve visita, recibimos a 30 residentes, principalmente niños y adolescentes”. En el regreso a Valparaíso, la unidad también llevó a estudiantes que comenzarán su año académico en el continente.
Tecnología al servicio de la ciencia
La Armada de Chile inició en 2007 el proyecto Medusa con el fin de adquirir un buque oceanográfico para fomentar la investigación científica marina en el país. Se seleccionó un diseño de Skipsteknisk y la construcción fue llevada a cabo por Asmar Talcahuano. El proyecto implicó una inversión preliminar de aproximadamente 62 millones de dólares, cofinanciada por la institución y la Subsecretaría de Pesca.
Los trabajos comenzaron en julio de 2008, y aunque la entrega estaba programada para 2011, la unidad sufrió daños debido al terremoto y tsunami del 27 de febrero de 2010, que destruyeron las instalaciones de Talcahuano el día que estaba prevista su botadura. El buque fue desvarado en enero de 2011 por la empresa neerlandesa Mammoet y fue oficialmente entregado a la Armada de Chile el 2 de abril de 2013.
El buque mide 74,1 m de eslora, 15,6 m de manga y 5,8 m de calado. Tiene un desplazamiento de 3.400 toneladas y una autonomía de 35 días. Equipado con tres motores diésel Wärtsilä L20 de 1600 W/1000 RPM, puede alcanzar una velocidad de crucero de 11,1 nudos y una máxima de 14,4 nudos. Su tripulación está compuesta por nueve oficiales y 34 suboficiales y marineros, y tiene capacidad para transportar a 25 científicos.
El AGS-61 Cabo de Hornos cuenta con excepcionales capacidades de autonomía y maniobra para llevar a cabo investigaciones oceanográficas e hidrográficas. Gracias a la tecnología de los sensores de Kongsberg Maritime, puede realizar investigaciones de alta calidad y obtener información y datos que aporten al conocimiento del océano y a la interacción océano-atmósfera.
Dispone de una ecosonda multihaz SBP 120 para el perfilamiento del fondo sub-superficial, una ecosonda multihaz de alta profundidad EM 122 para detectar objetos y realizar mapeo del fondo marino hasta9400 m, una ecosonda multihaz de media profundidad EM 710 para batimetría e imágenes del fondo marino hasta 1.000 m, una ecosonda monohaz de alta profundidad EA 600, y el sistema de posicionamiento acústico de alta precisión HiPAP 500, entre otros equipos.