Tras extensos y complicados trámites diplomáticos y administrativos, el Departamento de Estado y el Departamento de Defensa de los Estados Unidos han otorgado plena autorización a la Fuerza Aérea Uruguaya para proceder con la transferencia de sus dos antiguos Hércules C-130B (que arribaron a Uruguay en 1990, donados por Estados Unidos, y que contaban con tres décadas de uso previo, incluyendo alas y otros componentes de la serie H).