La diabetes tipo 2 es una de las enfermedades crónicas más prevalentes a nivel mundial, afectando alrededor del 12% de la población adulta en Chile, según la Resolución N°1051 de la Cámara de Diputados. Esta cifra ha ido en aumento en la última década, pasando de 850 mil a 1 millón 700 mil casos diagnosticados. La diabetes solía afectar principalmente a personas mayores de 60 años, pero ahora se observa en individuos más jóvenes, entre 30 y 40 años, debido al sedentarismo y al consumo de alimentos ultraprocesados que contribuyen a la obesidad, un factor de riesgo para la enfermedad.
Es crucial controlar la diabetes tipo 2 para evitar complicaciones como daño a los vasos sanguíneos, problemas renales, visuales y cardiovasculares. Cambiar la alimentación, realizar ejercicio y adoptar hábitos saludables pueden marcar la diferencia en el control e incluso la reversión de la enfermedad. Limitar el consumo de alimentos que aumentan los niveles de azúcar en sangre, junto con la ingesta adecuada de micronutrientes esenciales, puede ayudar a estabilizar los niveles de glucosa.
Además, es importante personalizar la alimentación según el metabolismo de cada individuo y adoptar un enfoque integral en el estilo de vida, incluyendo una dieta cetogénica o baja en carbohidratos, ejercicio de fuerza, calidad del sueño, reducción del estrés y apoyo social. Aunque en algunos casos los medicamentos son necesarios, las intervenciones nutricionales adecuadas pueden reducir la dependencia de fármacos o incluso prescindir de ellos en ciertos pacientes.
En el Día Mundial de la Diabetes, se destaca la importancia de realizar cambios en el estilo de vida para mejorar la calidad de vida, prevenir complicaciones y, en muchos casos, revertir la enfermedad. Cada decisión relacionada con una alimentación consciente y un estilo de vida activo tiene un impacto directo en la salud y el bienestar de las personas.
Con Información de chilelindo.org