La Fiscalía de Corea del Sur ha comenzado una investigación por alta traición contra el presidente Yoon Suk Yeol, en relación con la ley marcial que él mismo declaró y que fue suspendida de inmediato por el Parlamento, ante solicitudes de renuncia.
Park Se Hyun, a cargo de la investigación especial sobre los eventos del martes, indicó que el inicio de estas investigaciones se debe a «las numerosas denuncias» presentadas contra el presidente, según la agencia de noticias oficial Yonhap.
Además, el presidente Yoon está siendo investigado por presunto abuso de poder durante este episodio.
A pesar de las masivas protestas en su contra, Yoon resistió un intento de moción de censura y, por ahora, no tiene planes de renunciar.
«La declaración de la ley marcial fue una decisión desesperada como presidente», explicó después de emitir la orden, acusando a la oposición de simpatías por Corea del Norte y prometiendo que «nunca» volvería a implementar una medida similar.
Incluso el líder del gobernante Partido del Poder Popular (PPP), Han Dong Hoon, junto con el primer ministro Han Duck Soo, declararon que el presidente «debe renunciar a su cargo» tras la controversia generada por la aprobación de la ley marcial.
«La mayoría de la población ha decidido que el presidente no puede seguir gobernando durante el resto de su mandato y debe renunciar», afirmó Han Dong en la sede del partido.
En este contexto, el líder del partido aseguró que se trabajará para resolver la situación política de manera «estable» y se buscará restablecer «la democracia liberal minimizando el caos que podría resultar de la renuncia del presidente para la República de Corea y su pueblo».
PURANOTICIA
Con Información de chilelindo.org