El alcalde recientemente electo de Santiago, Mario Desbordes, ha expresado su desacuerdo con la propuesta del gobierno de construir una cárcel de alta seguridad cerca de Santiago 1, argumentando que no es apropiado tener una cárcel de este tipo en el centro de la capital. Estas opiniones coinciden con las críticas de la actual alcaldesa, Irací Hassler, quien también se opone al proyecto.
Por otro lado, el subsecretario del Interior, Luis Cordero, ha defendido la construcción de la cárcel como un «bien común» debido a la creciente necesidad de espacio en el sistema penitenciario. Sin embargo, Desbordes ha expresado su intención de negociar con el Ministerio de Justicia para detener el proyecto. En caso de no alcanzar un acuerdo, el municipio está preparado para emprender acciones legales para evitar su realización.
Entre las opciones consideradas, el nuevo alcalde plantea impugnar el proyecto debido a la falta de permisos de la Dirección de Obras Municipales y a que no debería llevarse a cabo mediante una ampliación de la concesión de obra pública.
Mientras tanto, el Ministerio de Justicia continúa avanzando con los trámites del proyecto y elaborando una agenda de construcción de cárceles para presentar en el Congreso con el objetivo de abordar el problema de la sobrepoblación en las prisiones.
Con Información de chilelindo.org