El presidente sirio, Bachar al Asad, ha abandonado Siria después de negociar con varios actores involucrados en el conflicto armado, según confirmó el Ministerio de Exteriores de Rusia. En un comunicado, la Cancillería rusa expresó que al Asad renunció a su cargo para promover una transición pacífica del poder en el país. Rusia, aunque no participó en las negociaciones, está en contacto con grupos de la oposición siria, instando a evitar la violencia y priorizar un diálogo político respaldado por la ONU. Moscú también está tomando medidas para proteger a sus ciudadanos en Siria.
Tras el colapso de su gobierno debido a una ofensiva insurgente liderada por el Organismo de Liberación del Levante, al Asad se desconoce su paradero, aunque se especula que podría encontrarse en un país africano o su avión haya sido derribado. Mientras tanto, el primer ministro sirio, Mohamed Ghazi al Jalali, supervisará las instituciones públicas hasta la formación de un nuevo gobierno.
Rusia ha puesto en alerta máxima sus bases militares en Siria, como la base aérea de Hmeimim y la base naval de Tartus, para proteger sus intereses estratégicos en la región. El ministro de Exteriores ruso desmintió rumores sobre la evacuación de las bases y reafirmó el apoyo militar de Rusia a Siria.
El derrocamiento de al Asad marca un momento crucial en el conflicto sirio, generando incertidumbre sobre el futuro del país y la influencia de actores internacionales en la región.
Con Información de chilelindo.org