En un esfuerzo por contrarrestar la planificación de delitos desde el interior de las cárceles, el Gobierno ha anunciado la implementación de un avanzado sistema de inhibición de señales de celulares en diversos recintos penitenciarios del país.
La medida, anunciada por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, busca frenar la organización de actividades criminales y estafas telefónicas llevadas a cabo por reos. De hecho, cifras de Gendarmería revelan que sólo en 2023 se incautaron 26 mil dispositivos electrónicos. En 2022, en tanto, la cifra superó los 30 mil, y el 2021, bordeó los 28 mil.
Instalación paulatina
La iniciativa se centrará inicialmente en las cárceles ubicadas en el sector de Avenida Pedro Montt y Nueva Centenario en Santiago, específicamente en la Ex Penitenciaría y Santiago 1. El ministro Cordero destacó la relevancia de esta tecnología, inédita en América Latina, y aseguró que no se permitirá ninguna acción que busque inhabilitar, perjudicar o sabotear su implementación, advirtiendo que «en esto, el Gobierno no dará pie atrás».
Este sistema de inhibición forma parte de un proyecto más amplio que incluirá otros nueve establecimientos carcelarios en el país, incluyendo a Arica, Copiapó, Colina, Valparaíso, Temuco, Valdivia, Puerto Montt y el Centro de Detención Preventiva de Puente Alto. Sin embargo, el secretario de Estado evitó entregar más detalles “por razones de seguridad”.
Respecto a posibles motines al interior de los recintos penitenciarios, en protesta a la medida, Cordero indicó que, “Gendarmería de Chile ha tomado todos los resguardos y ha levantado todo tipo de información. También hay plena coordinación con Carabineros, la PDI y el Ministerio Público”. “Lo que quiero transmitir a todas las personas es que la inhibición se va a ejecutar”, sentenció.